Por Julio María Sanguinetti
Las renuncias de los Presidentes de CODICEN y ANTEL marcan, dada la importancia de ambos organismos, un primer balance de aspectos relevantes de la gestión de gobierno. A la vez, destacan la importancia del aporte del Partido Colorado en lugares de la mayor trascendencia.
La renuncia del Dr. Robert Silva pone de relieve la importancia de la Transformación Educativa en curso y la necesidad nacional de su continuidad. Por esa razón, la designación de la Dra. Virginia Cáceres para sustituirlo asegura que no haya desvíos en ese proceso fundamental. Ella ha sido la mano derecha del Dr. Silva desde su cargo de Secretaria General del CODICEN. Ha trabajado en todos los aspectos de esa gestión y de lo que se trata ahora es de asegurar su continuidad. No han faltado objeciones a que, siendo abogada, no ha tenido en cambio actividad docente. Pobre argumento, porque lo técnico en materia pedagógica sigue a cargo de las respectivas direcciones que han planificado y puesto en práctica los cambios. De lo que se trata es de que el rumbo general de la administración no se desvíe y de que no se pierda la mirada de conjunto, que de ningún lado se tiene mejor que desde el CODICEN. Nadie mejor, entonces, que su Secretaria General. Ella añade, además, su condición de mujer (sería la primera en el cargo de Presidente) su experiencia administrativa, su capacidad personal y el impulso de su juventud.
Sobre la sustancia de la Transformación Educativa ya hemos hablado una y otra vez. Es una respuesta global a la profunda crisis heredada de los gobiernos del Frente Amplio. Más de una vez lo explicitó, con pesar, el ministro Astori, que decía que habiendo puesto más dinero que nunca se cosechaban empero los peores resultados. Es notorio que la influencia sindical en la educación uruguaya ha sido nefasta en todos sus aspectos. En lo pedagógico por su inmovilismo, en los cívico por su proselitismo, en lo administrativo por el clientelismo y en el rendimiento por el constante clima de agitación, artificialmente sostenido. De ahí los resultados tan entristecedores reflejados en las pruebas nacionales e internacionales.
Básicamente, de lo que se trata ahora es de instalar el paradigma de la enseñanza por competencias y hacer de los aprendizajes el objetivo a alcanzar. En una palabra acercar la educación a la vida real.
En lo que hace a ANTEL, está claro que es el más cumplido ejemplo del mundo de falacias en que vive el Frente Amplio. Oír a SUTEL en el debate de la LUC y al coro que repetía sus alarmistas pronósticos era vivir por anticipado la tragedia de la destrucción de la empresa pública. Los argumentos eran inconsistentes pero ahora está la realidad para demostrar la total ignorancia de los planteos.
Como sosteníamos cuando defendíamos la LUC, la "portabilidad numérica", a quien más ha beneficiado es a ANTEL y fundamentalmente a la población consumidora de sus servicios. En efecto, el precio de la Mega ha pasado de 79 a 20 pesos o sea una rebaja de cuatro veces. Al mismo tiempo se ha multiplicado por cuatro el uso de su servicio, de modo que tanto el ciudadano como la empresa pública han tenido una satisfacción superior a todo lo esperado.
Cabe agregar que todo esto se ha hecho con los mejores balances de la historia de Antel y que se puede afirmar que la tecnología más avanzada llega hoy de modo equitativo todos los sectores de la población, tanto en el interior como en Montevideo, donde sólo estaba atendida con la Banda Ancha la costa capitalina. Hoy el 5G está en Casavalle, en los 200 pueblos del interior y en todas y cada una de las escuelas rurales.
Pocas veces la realidad le ha dado un desmentido tan categórico a la vacía y sistemática propaganda frentista. En el caso además, como batllista, podemos decir con orgullo que este es nuestro modelo para las empresas del Estado, compitiendo en el mercado para mantener los niveles de eficiencia que nunca aseguran los monopolios. Estos, que pudieron ser necesarios en su tiempo para el nacimiento de las empresas, ya no tienen sentido y sólo el conservadurismo de quienes se dicen progresistas puede seguir sosteniéndolos.
Aún falta tiempo para que la presente administración pueda ser su balance global. Estos adelantos, sin embargo, nos van mostrando ya resultados concretos. Ellos a su vez nos desafían para seguir adelante en un constante proceso reformista, sólo cuestionado por quienes siguen soñando con utopías regresivas o populismos fracasados.
Para quienes en ocasiones se preguntan qué hace el Partido Colorado en el gobierno, allí está la respuesta: aportar experiencia en la conducción y ratificar el orgullo de lo que es ese tan discutido Estado Batllista.